jueves, 31 de marzo de 2011

31.03.11

Eso, lo que logran apreciar en la imágen es mi salón, en efecto, esta vacio, pero lo que ustedes no se imaginan es que este panorama es más que normal entre las 6 hasta las 8PM y explicare más al respecto.
Resulta que al concluir la clase de las 5 PM, el resto de mi salón tiene que emigrar, no se si cuando tenia 8 meses de nacido accidentalmente resbale de los brazos de mi madre y me golpee tan fuerte en la cabeza que me llevo a severas afectaciones años después, de ser cierta esa teoría una de las más grandes afectaciones es que a mi no me da por huir de la universidad a la menor provocación.
Aquí en donde ustedes pueden argumentarme "Bueno, Abraham pero es que seguramente van corriendo a su trabajo o a donde están haciendo prácticas, porque como buenos estudiantes universitarios están ansiosos por involucrarse en el ámbito laboral de su carrera".
Tristemente voy a desilusionarlos, porque nadie tiene obligaciones ni responsabilidades a esa hora, nadie lo aprovecha y si bien en esas dos horas, una es "hora libre", no se aprovecha, no hay un perfil ni una inquietud por parte del resto para buscarlo y tarde o temprano eso se puede volver contagioso para quien escribe esto.
Y es que esto es muy sintomatico, nadie en mi grado toma en serio las clases de este semestre, de no ser por la materia de Seminario de Tesis, esto en vez de llamarse "8º semestre de LCC" debería de llamarse "La Risa en Vacaciones 2011".
No hay interés por parte de los alumnos y finalmente los profesores están contra la pared, porque la apatía puede más que las ganas de los profesores que quieren impartir una clase o un proyecto mensual o semestral.
Es una lástima que esto ocurra, porque seguramente no es el único caso en esta universidad y en este país, que lastima que estando en un nivel universitario se eche en saco roto lo valioso que puede resultar este proceso, comprendo que somos jóvenes y que lo ultimo que nos interesa son las responsabilidades, pero lamentablemte si esto es lo que estamos ofreciendo ante nuestra única responsabilidad, ya me quiero imaginar lo que va a ocurrir el día en el que todas esas personitas tengan que enfrentarse ante la realidad laboral o la responsabilidad de simplemente sobrevirir.

Mi nombre es Abraham y tuve la pésima suerte de pertenecer a una generación apática, sin ganas de superarse ni ser competitivos como universitarios y que lo más trascendente para esa generación es "tener las suficientes asistencias para no llevármela a extraordinario" y "huir en chinga para irme con mi novio o a cotorrear".
...y me importa un carajo si tengo represalias por lo escrito el día de hoy

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